En este grupo, se realiza la permanente adoración a Jesús presente en la Eucaristía; mediante el compromiso de sus miembros de rendir honor y acción de gracias a Jesús por su presencia; así como tener un encuentro personal con Él, buscando en todo momento hacer su voluntad.
En ese sentido, los miembros del grupo adquieren tres características fundamentales:
- Ser Eucarístico: manifestada a través del fomento del clima eucarístico en la familia y comunidades eclesiales, así como en la participación frecuente en la Celebración Eucarística y en el Sacramento de la Reconciliación.
- Ser evangelizador: expresada en su colaboración en las tareas eclesiales.
- Ser Mariano: patentizada en el gran amor a María, a la que se tendrá como modelo de adoración. El grupo de adoradores invita a todos los fieles a visitar el Oratorio durante una o varias horas por semana para disfrutar de la presencia del Señor; contemplar su grandeza, adorarlo, platicarle sus penas y alegrías y para recibir su amor.